El embrión precoz



Iranna Flaviá Luciano

Cuando freímos un huevo, utilizamos un sartén, aceite y fuego, de esta forma obtenemos un producto igual al que obtiene un adolescente cuando inicia a temprana edad sus actividades sexuales.

La adolescencia es el camino hacia la pubertad, que inicia en el niño(a) entre los 12 a los 14 años. Esta fase esta caracterizada por la carencia de experiencia, auto control y claridad mental. Los cambios físicos, sociales y emocionales son propios de este período que concluye con la madurez o vida adulta.

En este momento, los adolescentes confían y consultan a sus amigos sus inquietudes. Los utilizan como método de referencia y modelo a seguir. Según ellos, son los únicos que pueden comprenderlos.

Los principales medios de comunicación masiva influyen en la mente del consumidor joven por medio de la publicidad, para impulsar la compra de productos y servicios, valiéndose de la explotación del morbo, lo que incrementa la tendencia a experimentar.

En República Dominicana, según datos estadísticos recientes, recopilados en diferentes regiones del país, con distintos niveles socioeconómicos, confirman que niños(as) en edades entre 10 y 17 años han iniciado su debút en la vida sexual, y en la mayoría de los casos ya son madres.

Casos de enfermedades de transmisión sexual, paternidad irresponsable, muerte, aborto espontáneo, parto largo y trabajoso y niños con bajo peso, son algunos de los actores que entran en escena en este penoso drama real, público y social.

Contar con una edad madura, nivel académico, empleo seguro y compromiso en la pareja, son algunos de los factores a tomar en cuenta antes de ser padres.

Por esto es necesario abrir los canales de comunicación y generar los vínculos de confianza de los padres hacia los hijos para iniciar la educación sexual. Mediante el diálogo se expondrían los riesgos y el nivel de responsabilidad que representa iniciar una actividad sexual precoz.

Es preciso, crear un plan nacional dirigido a padres e hijos, en coordinación con la Secretaría de Estado de Educación y la Secretaría de Estado de Salud Pública y Asistencia Social, involucrando todos los sectores del ámbito nacional, con la finalidad de crear conciencia en el adolescente para que posterguen las actividades sexuales y se les informe sobre las consecuencias de un embarazo no deseado y la contracción de alguna enfermedad de transmisión sexual.

“Jóvenes es preciso caminar un paso atrás del mundo”

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